El ataque a balazos contra el supermercado Único, de propiedad del suegro del futbolista argentino Lionel Messi, conmocionó a ese país y despertó serias dudas acerca de la seguridad en la ciudad de Rosario, donde nació el astro.
El intentó hacer públicas algunas hipótesis y una de las más delicadas es la que maneja el intendente de Rosario, Pablo Javkin, que consideró que el sucesor tiene las características de un ‘atentado narcoterrorista’.
Después del ataque al supermercado, en el lugar abandonado un cartel que decía: «Messi te estamos esperando. Javkin es narco, no te va a cuidar».
Segun publica el diario la Nación, Javkin dijo a «los que tienen que cuidarnos» y levantó sospechas sobre la policía y las fuerzas de seguridad que deben patrullar en esa zona.
“En el video del ataque se nota una clara tranquilidad con la acción. Es muy sospechoso. Dudo de todo”, dijo Javkin en la puerta del supermercado.
Ya había antecedentes en Rosario
Non es la primera vez que el deposito central de esa cadena de supermercados, propiedad de José Rocuzzo, Recibe ataques violentos. Anteriormente la intendencia había hablado de la necesidad de que hubiera mejor vigilancia en el sector.
“En varias reuniones que se dieron en las últimas horas, antes se atacó, se discutió la necesidad de incrementar los patrullajes en este sector, atravesado por peleas internas entre las bandas narco, sobre todo en barrio Triángulo”, publicó La Nación.
Según el mismo diario, «La mención a Messi en un mensaje mafioso buscó generar un impacto más allá del radio de los enfrentamientos entre los grupos criminales». Es la primera vez que mencionan al capitán del campeón del mundo para hacer ruido.
La estrategia, anteriormente, era atacar los medios de comunicación de Rosario. Ya hubo actos de características similares al de Supermercados Único, cuando el canal Televisión Litoral fue atacado a balazos en tres ocasiones. También se colgó entonces, en octubre de 2022, un cartel para crear zozobra: «Vamos a matar periodistas».
El año pasado murió en Rosario 288 personas, producto de la lucha entre grupos criminales. También hubo ataques a bala a edificios públicos, cárceles, comisarías, sedes municipales y residentncias de magistrados.
Javkin plantó la duda, en medio de las investigaciones, del papel de la Policía y de su complicidad, ya no cono socios de los criminales, sino como sus empleados. El miércoles pasado fueron capturados un joven sicario de 23 años y su mamá, que hace parte de la Policía de la ciudad, quien le pasaba información de la comisaría en que trabajaba.
DEPORTADO
Con La Nación (Argentina-GDA)